Viajes genealógicos: descubre tu pasado
¿Sabes de dónde vienen tus antepasados? Cada vez más personas se apuntan a los viajes genealógicos: oportunidades increíbles para conocer a fondo tus raíces. Se trata de organizar una escapada escogiendo el destino turístico en base al lugar de procedencia de tu familia. ¿Quieres saber cómo se hace?
El secreto está en el ADN
Los viajes de moda están estrechamente relacionados con el auge de los tests de ADN. Cada vez más laboratorios ofrecen este tipo de análisis, y realizarlos es muy sencillo. Basta mandar una muestra de saliva y esperar un par de semanas para conocer todos los secretos de tu código genético.
Cuando llegan los resultados es el momento de descubrir el lugar de procedencia de tus antepasados. ¿Traerá alguna sorpresa? Este tipo de estudios se remonta montones de generaciones atrás, por lo que podrás ir mucho más allá en la historia de tu familia de lo que jamás imaginaste.
Pero, lo más importante, ¿cómo se usan estos resultados para organizar un viaje original e inolvidable?
Los pasos fundamentales para hacer estos viajes diferentes
Para que tú también puedas hacer estos viajes que son tendencia tan solo necesitas seguir cuatro sencillos pasos:
1. Un test
Por supuesto, el primer paso es hacerte el test y maravillarte con los resultados. Esto puede llevarte algunos días, por lo que lo más recomendable es que tomes toda la antelación posible.
2. Investigar
Pasada la sorpresa inicial, es el momento de ponerse las manos a la obra. Ahora hay que hacer la investigación correspondiente. Infórmate y aprende sobre los distintos lugares que salgan en tus resultados, con dos finalidades: aprender más sobre ti y ayudarte a escoger la parte del mundo por la que quieres empezar tu viaje genealógico.
3. Transporte
Cuando ya hayas decidido el destino y conozcas bien la relación de tus antepasados con ese lugar, será hora de buscar la forma de llegar allí. Puedes usar el medio de transporte de tu elección, pero es muy importante que sepas que cada vez se organizan más cruceros específicamente diseñados para hacer este tipo de viajes. Y, lo que es mejor, podrás compartir esta experiencia tan especial con mucha otras personas que también se han embarcado en la búsqueda de sus raíces.
4. Descubre
De entre todas las formas diferentes de viajar, esta va a requerir que te impliques al máximo una vez hayas llegado a tu destino. Para sacarle todo el partido a la experiencia tendrás que empaparte de la cultura del lugar, conocer sus costumbres… ¡incluso hay quien busca evidencias del paso de sus antepasados por la zona!
Desde luego, no nos cabe duda de que hacer este tipo de viaje puede resultar mentalmente agotador. ¡Pero te aseguramos que merece la pena! Este trayecto sirve para conocerse a uno mismo mucho más profundamente, reconocer tus raíces y descubrir un nuevo lugar en el mundo con el que tendrás una relación muy especial.
Estas son las claves para que todos los viajes genealógicos salgan a pedir de boca. Aprovecha esta oportunidad única para conocer un poco más sobre ti y sobre tu familia visitando lugares increíbles en todo el mundo.