La capital de Serbia, Belgrado, destaca por ser una ciudad con mucha cultura y un rico patrimonio histórico. Además, cuenta con una vida nocturna que no podrás encontrar en otros lugares.
¿Qué no te puedes perder cuando vayas a viajar a Belgrado? Hay varias ventajas que puedes aprovechar, tanto por su patrimonio cultural y artístico como por su gastronomía y lugares de recreo.
Belgrado
La ciudad de Belgrado es de origen romano, y se emplaza sobre el antiguo asentamiento de Singidunum, del siglo III AC. La cuestión es que ha sido derruida y reconstruida hasta 38 veces por los diferentes avatares históricos en los que se ha visto envuelta al ser, en muchas ocasiones, lugar fronterizo con los imperios romano, bizantino y otomano.
Hoy, Belgrado es una urbe de más de 2 millones de personas, capital de Serbia y una de las ciudades más importantes del este de Europa. Si vas a hacer un viaje a Belgrado, te recomendamos que conozcas los siguientes lugares.
Museo Nikola Teszla
Nikola Teszla es uno de los inventores más importantes de la historia de la Humanidad, y es de origen serbio. El aeropuerto de Belgrado lleva su nombre y en el centro de la ciudad hay un museo en el que vas a encontrar varios objetos del genio, más de 160.000 documentos y también una serie de inventos científicos.
Templo de San Sava
Serbia es un país de cultura ortodoxa, y el Templo de San Sava es el principal monumento religioso de Belgrado. El templo se erige en el terreno donde están supuestamente los restos de San Sava, fundador de la Iglesia de Serbia y que vivió durante los siglos XII y XIII.
Es la iglesia ortodoxa más grande que existe en el Viejo Continente, su construcción se inició el 1935 y se financia con las aportaciones de los fieles, por lo que el interior está aún por decorar, debido a los parones que ha sufrido.
Knez Mihailova
Esta calle peatonal, de casi un kilómetro de longitud, une la fortaleza de Kalemegdan con la Plaza de la República, siendo una de las principales arterias de la ciudad y su principal eje comercial. Además, cuenta con varias residencias de finales del siglo XIX protegidas por su valor arquitectónico.
La calle cuenta con la sede de instituciones culturales nacionales e internacionales, como entre ellas la Academia de las Artes y las Ciencias y sede de varias delegaciones de empresas importantes.
Plaza de la República
Esta plaza está la estatua del príncipe Miguel de Serbia, y varios edificios emblemáticos, entre ellos el Museo Nacional y el Teatro Nacional, aunque al principio solo estaba el edificio del teatro.
Se erigió a finales del siglo XIX y hoy es uno de los principales puntos de reunión de los belgradenses, debido a su situación céntrica.
Fortaleza de Kalemegdan
La antigua fortaleza de Kalemegdan, que se conserva prácticamente intacta, es hoy el principal parque público de Belgrado, con varios comercios y negocios de restauración. Este era el núcleo primitivo de la urbe, cuando fue fundada en el siglo III AC. Hoy, lo habitual es que los belgradenses vayan a pasar los días festivos en esta área.
En el recinto, también podemos visitar el Víctor, una estatua de bronce que corona una columna, que simboliza la capacidad del pueblo serbio de reponerse de las tragedias, en este caso de las pérdidas durante la Iª Guerra Mundial.
Skadarlija
Este barrio es la zona tradicionalmente bohemia de la ciudad, epicentro de la vida cultural del país donde, además, puedes encontrar todo tipo de locales de ocio y restauración.
Uno de los atractivos del barrio es que se ha conservado muy bien el empedrado originario de la calle central, tal y como estaba en el siglo XIX.
Río Danubio
Belgrado no se entiende sin la presencia del río Danubio, que es navegable en este punto y ha servido como ruta comercial de primer orden entre Europa Central y Oriental. Puedes contratar un crucero para ver la ciudad desde un barco y disfrutar de las vistas.
El río Danubio también cuenta con zonas de playa fluvial con kioscos y lugares donde sentarse y disfrutar del sol.
Vida nocturna de Belgrado
Belgrado cuenta con una vida nocturna muy alegre y activa, pero la mayoría de las discotecas se concentran en las riberas del Danubio, concretamente en los muelles, con las tendencias musicales del momento. El precio de las entradas es algo más barato que en una gran ciudad española.
Todos los días de la semana hay fiesta y acude gente de toda Europa, sobre todo del este. Existen clubes flotantes donde tendrás que hacer reserva, pero ponen todo tipo de música. Otra zona de fiesta es Ada Ciganlija.
Consejos para el viaje
En primer lugar, te queremos recomendar que contrates el viaje con antelación y lleves el DNI y el Pasaporte, aunque puedes estar en el país un máximo de 90 días solo con alguno de estos documentos. Esta es la mejor forma de conseguir vuelos a Belgrado a un buen precio, aunque es cierto que, hoy, aún no es una ciudad con un grado de masificación turística como podemos encontrar en otras zonas del continente.
En segundo lugar, si buscas hotel en Belgrado, la ciudad cuenta con una oferta amplia, por lo que no te va a resultar difícil encontrar hoteles de cuatro o cinco estrellas donde alojarte, que, por regla general, están en el centro de la ciudad. La relación calidad-precio de estos establecimientos para un español es buena.
En tercer lugar, la ciudad cuenta con una amplia oferta de restauración, en especial en zonas tradicionales como el centro histórico. No obstante, también existen locales de comida rápida. Te recomendamos que pruebes la pljeskavica si te gusta la carne, o que disfrutes de las ensaladas y sopas propias de la zona.
Finalmente, indicarte que en Belgrado existe una amplia red de transportes públicos: tren de cercanías, autobús, trolebús y tranvía. Si te vas a mover por la zona central de la ciudad, lo ideal es optar por el autobús, puesto que la función del tren de cercanías es unir el extrarradio.
Belgrado es una ciudad interesante para aquellas personas que buscan un lugar donde hacer turismo cultural y de ocio sin la masificación de las grandes capitales europeas y con unos precios accesibles.