Viajar a Tokio con un bebé

El primer destino que elegimos para viajar en familia fuera de España fue Tokio. Anteriormente, habíamos recorrido Japón en pareja durante dos meses para descubrir que iba a ser un país que se convertiría en uno de esos lugares a los que siempre querríamos volver. Esperamos a que Koke tuviera las vacunas básicas puestas y a sus poco menos de 5 meses, nos montamos en el que fue el primero de muchos vuelos de más de tres horas (ya había volado a Canarias y Baleares con uno y tres meses). Y es que desde que hace 6 años, descubrimos los enormes beneficios terapéuticos que viajar tiene sobre nosotros, hemos concentrado más que nunca nuestros esfuerzos en regalarle a el mundo nuestro hijo. A Tokio le siguieron Shanghai, Nueva York, París, Sudáfrica, Colombia, Argentina, Puerto Rico, Miami, Chicago, San Francisco, un road trip por la costa oeste de USA, Frankfurt, Brasil, Roma, Chile y Cuba. Una lista que pretendemos seguir engrosando después de experimentar todo lo que el viaje le aporta también a los niños.

 

Pero volvamos a nuestro viaje a Tokio… Es cierto que no era la primera vez que íbamos a Japón, pero nos sentíamos como si lo fuera. Nunca antes nos habíamos planteado si esta era una ciudad fácil o difícil para recorrer con un carrito, si la gente sería agradable con nosotros, si nos mirarían con desaprobación por entrar con un bebé en ceremonias religiosas o si había una sección más o menos grande de pañales en los supermercados. En lugar de Viajar a Tokio con un bebé, podríamos haber titulado este artículo como “padres primerizos en el país del sol naciente”.

 

Si tú también estás pensando en conocer este destino con un bebé, estas son algunas de las cosas que a nosotros nos hubiera gustado saber…

 

 

¿Cuando viajar a Japón? 

Japón es un país con 4 estaciones por lo que todo el año es un buen momento para viajar, pero tanto la primavera (de marzo a mayo) como el otoño (de septiembre a noviembre), son dos momentos muy especiales para conocerlo a todo color. Y es que las múltiples tonalidades que adquieren las hojas del arce japonés son de uno de los mayores atractivos del país.

 

Logística específica para bebés

Japón es uno de los países con la población más longeva del mundo, pero eso no ha impedido que Tokio sea una ciudad bien preparada para cubrir las necesidades de los más pequeños:

• Hay salas de lactancia y cambiadores en todos los edificios públicos y centros comerciales. Suelen estar señalizados y muy bien equipados. Lo cierto es que son los mejores que nos hemos encontrado por el mundo.
• Los japoneses son un auténticos fans de los onsen (baños con abluciones) y por eso en prácticamente todas las casas y hoteles hay bañeras. Si quieres aligerar el equipaje con respecto a la cuna de viaje o el carro, existen varias tiendas especializadas en las que se pueden alquilar (Nice baby, Baby friend, Mama’s Store, Kashite Netto, Duskin, Aiiku, Yamasaki)
• No en todas las convenience store ni farmacias venden pañales. Puedes encontrarlos en los grandes almacenes con planta para niños (tipo El Corte Inglés) y, con toda seguridad, en los Yodobashi Camera. Aunque la forma más barata de conseguirlos es por Amazon JP (versión en inglés)  que envía en 24-48h a toda la ciudad sin costes extra.

 

 

 

Alimentación y restaurantes

Japón es un país con unos de los estándares de limpieza más altos del mundo, por lo que comer en la calle es más que seguro. La gastronomía y la forma de presentar los platos son, entre otros, dos de sus puntos fuertes. Lo difícil es resistirse a no probarlo todo.

 

• El agua de los grifos es potable. En la mayoría de los restaurantes está fresca y disponible de forma gratuita para los clientes.
• En casi todos los restaurantes hay tronas para bebés, con excepción de los más estrechos en los que te pedirán que dejes el carrito aparcado en la calle (estará en el mismo sitio que lo dejaste cuando termines de comer). Si el niño ya maneja cubiertos, hay unos palillos especialmente pensados para ellos con diseños muy divertidos.
• Todos los supermercados y muchos establecimientos, cuentan con comida preparada que se hace a diario. Según van pasando las horas del día, los precios van bajando y al final de la jornada puedes encontrar verdaderas gangas para evitar que esta termine en la basura.
• En los bares de los barrios con más vida nocturna, es posible que encuentres establecimientos que no permitan la entrada de niños. Y es que aunque prácticamente en toda la ciudad está prohibido fumar fuera de las zonas señalizadas, en estos lugares sí está permitido.

 

Salud y vacunas

No hay ninguna vacuna obligatoria para viajar a Tokio. No obstante, siempre es recomendable comunicarse con la unidad del niño viajero de tu provincia para conocer el estado de salud actual del país y contratar un seguro de viajes que nos solucione cualquier problema en caso de necesidad.

 

 

Moverse por la ciudad

Tokio tiene uno de los metros más sencillos del mundo por su señalización y manejo. Además, está perfectamente preparado para utilizarlo con un carrito de bebé. Hay ascensores y rampas en todas partes e incluso vagones con espacio específico para los carritos. Aunque eso sí, es mejor evitarlo en hora punta.

Por toda la ciudad hay grandes aceras paseables, rampas y el tráfico es ordenado. Eso sí, hay algunos lugares (como es el caso del Tsukiji Market) donde no está permitido el acceso con carro, por lo que viajar a Tokio con mochila de porteo es muy recomendable (te vas a dar cuenta muy rápido de que los tokiotas son grandes amantes del porteo).

 

Además, existe también un servicio de bicicletas públicas (muchas de ellas con sillas de bebé), ya que Tokio es una ciudad bastante plana y con mucho carril bici.

 

 

Tokiotas vs. bebés

Para nuestra sorpresa, pudimos comprobar cómo más de uno dejaba a un lado su estricto protocolo para hacerle carantoñas al bebé.

Volvimos a casa cubiertos de regalos. De buena suerte, de protección, de salud… Conocimos otra cara de los japoneses diferente a la que habíamos visto cuando fuimos a visitarla los dos solos. Una mucho más tierna y entrañable. Inesperada. Inolvidable.

 

Hasta aquí esta pequeña guía para viajar a Tokio con tu bebé.

Si como nosotros quieres regalarle a tus hijos el mundo, o te asaltan algunas dudas logísticas, déjanos un comentario en este post para que podamos responderte a la mayor brevedad posible (sobre este destino o cualquier otro) y ampliar con más información al respecto en futuros artículos.