Aventura, historia, naturaleza y animales. Esta es nuestra propuesta para disfrutar de este verano con los más pequeños de la casa sin salir de España.
Manzanares del Real (Madrid)
El pueblo de Manzanares, a 50 kilómetros de Madrid, se encuentra en el Parque Regional Cuenca Alta del río Manzanares y desde este municipio se puede acceder al lugar más llamativo del parque, La Pedriza, que data del siglo XIII, donde hay senderos de pocos kilómetros y poco desnivel para poder recorrerlos con los más pequeños. Otro de los atractivos de la zona es su castillo.
El castillo de Manzanares es una impresionante fortaleza gótica, del siglo XV, que se conserva en magnífico estado y que está dividida en dos cuerpos. En el primero de ellos se levanta la Torre del Homenaje y en el segundo, una ermita románica del siglo XIII anterior al castillo. Lo más destacado es la galería, de estilo gótico mudéjar. En la actualidad, el castillo de Manzanares del Real alberga un centro de actividades culturales de la Comunidad de Madrid. Dispone de varias salas de exposiciones, una biblioteca, salas de juntas, salas de lectura, y un patio porticado, con una magnífica acústica, en donde se celebran conciertos, conferencias, representaciones teatrales, cenas medievales y otros eventos.
Lagos de Covadonga (Asturias)
Situados en el corazón del Parque Nacional de Europa y a tan sólo 12 kilómetros del santuario, los Lagos de Covadonga están rodeados de un espectacular espacio natural. Un serpenteante y estrecho camino lleva a los míticos lagos del Enol y del Ercina, a 1.070 y 1.108 metros respectivamente, separados por la loma de la Picota. Las aguas del lago Enol, que alcanzan los veintitrés metros de profundidad en la zona meridional, permiten el baño en verano. A dos kilómetros se halla el lago del Ercina, con una profundidad que no supera los dos metros. En el punto más alto de los lagos, en la Vega de Ario, merece la pena observar la vista sobre los Urrieles, con la Torrecerredo al frente y el Cares a sus pies.
A siete kilómetros de Covadonga se localiza el mirador de la Reina desde donde se pueden contemplar excelentes vistas de los Lagos Enol y Ercina, y de los alrededores de los Picos de Europa, entre bosques de hayas y robles.
La ruta ideal para hacer con niños es la que va desde los lagos al Mirador de El Príncipe, pasando por el Hayedo de Palomberu y las minas de Buferrera.
Las Médulas (León)
En esta antigua exploración minera a cielo abierto, que se remonta a tiempos de la Hispania romana, los niños podrán entrar y salir de sus galerías y cuevas como auténticos exploradores. El resultado de aquellos trabajos es un conjunto de farallones, conos y promontorios raídos, de perfiles acerados, que muestran al sol su costra rojiza. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997.
La Janda (Cádiz)
En el incomparable marco del Parque Natural de los Alcornocales, discurre esta ruta histórico por los pueblos de la comarca de la Janda, que debe su nombre a la hoy desecada laguna de la Janda, que en su día fuera una de las más espléndidas zonas lacustres de Europa por su extensión, historia y su interés ecológico. En sus orillas se desarrolló la batalla en la que las tropas de Tarif vencieron a don Rodrigo y que supuso la entrada de los musulmanes en la Península en el 711. La ruta arranca en San José del Valle y concluye en Alcalá de los Gazules, no sin antes pasar por las poblaciones de Paterna de Rivera, Medina Sidonia y Benalup.
Cadaqués (Gerona)
La empresa Trip4real organiza en la localidad de Cadaqués la Ruta de los Piratas, que trascurre por el maravilloso Parque Natural de Cabo de Creus. Los niños tendrán que encontrar los tesoros que se esconde en este paraje con la ayuda de un mapa a pie y en barco.
Monfragüe (Cáceres)
Este parque está enmarcado por dos sierras separadas entre sí por seis kilómetros de distancia: la Sierra Norte y la Sur. La sierra septentrional abarca varios macizos montañosos, como la sierra del Mingazo, de la Serrana, de la Portilla y la sierra de la Fresneda. La Sierra Sur es de mayor altura y acoge a la sierra de Corchuelas y el Salto del Salto del Gitano. Sobrevolando los cielos del Parque se pueden contemplar ejemplares de buitres negros, águilas imperiales, águila perdicera, águila culebrera y cigüeña negra. Entre los mamíferos destaca la presencia de ciervos, venados, corzos, muflones, jabalíes, ejemplares de cabra montés, gineta, gato montés y tejones. Uno de los lugares más frecuentados por los visitantes del Parque es el castillo árabe que se localiza sobre un promontorio rocoso a 450 metros de altitud. Es uno de los mejores miradores del Parque y un lugar perfecto para el avistamiento de la fauna que habita estos lares. Desde este lugar se pueden ver ejemplares de buitres negros sobrevolar los cielos del Parque. De la fortaleza tan sólo quedan algunos restos: una torre de planta circular, fragmentos de muralla y parte de un aljibe. Según los datos obtenidos de las excavaciones arqueológicas realizadas, este lugar estuvo habitado desde la Edad del Bronce y fue poblado por romanos y árabes.
Otros de los atractivos de Monfragüe son las rutas que se pueden realizar a pie. La que empieza en la Fuente del Francés y finaliza en el Castillo de Monfragüe es ideal para realizarla para niños mayores de seis años. Si va con niños más pequeños tenéis que decantaros por la de Villareal de San Carlos a la Fuente de los tres caños.
Desde el Parque Natural de Monfragüe se puede acceder a otros espacios naturales de interés como son el Valle del Jerte y la Sierra de Guadalupe, situada al sureste.
Garganta de los Infiernos (Cáceres)
Esta Reserva, localizada en las inmediaciones del Valle del Jerte, constituye un paisaje de montaña de gran belleza surcado por bravos cursos de agua procedentes de la cercana Sierra de Gredos. La vegetación del área incluye bosques de fresnos y acebos, inmensas masas de brezos y pastos subalpinos en las cumbres. Truchas y nutrias habitan el interior y el margen de sus arroyos, el gato montés escala sus peñas y las águilas reales o culebreras surcan sus cielos. Esta ruta es perfecta en verano ya que después de caminar por sus senderos llegaréis a las piscinas naturales de Los Pilones, donde os podréis dar un chapuzón.
Parque de Cabárceno (Cantabria)
A tan solo 15 kilómetros de Santander se halla esta antigua explotación minera de hierro a cielo abierto donde viven más de un centenar de especies en régimen de semilibertad. Camellos, guepardos, rinocerontes, jirafas, yak, hipopótamos, osos pardos… son algunos de los animales que vais a poder fotografiar de cerca en este paraje de más de 750 hectáreas.
Una buena oferta para respirar aire puro y disfrutar de la familia.
Saludos.