Las escapadas de verano son las mejores, pues le infunden nueva vida a esta estación que puede hacerse larga. La costa africana está muy cerca, es fascinante y puedes conocerla en un fin de semana. ¡Te damos aquí una guía para ver Marruecos en dos días!
1. Los alfareros de Safí
Esta ciudad con influencias portuguesas fue un importante puerto atlántico. Una de sus actividades más permanentes ha sido la alfarería con una febril actividad en el barrio en el que se congregan estos artesanos.
También puedes visitar el Museo Nacional de la Cerámica, un lugar donde apreciarás piezas de asombrosa hermosura. La Kechla, su nombre árabe, fue una antigua fortaleza lusitana y conserva sus torres almenadas.
Aprovecha para darte un buen baño de mar en la playa Sidi Bouzid, muy amplia y bella, con servicios y Bandera Azul, desde donde puedes contemplar el imponente acantilado que rodea la ciudad.
2. Viajar a Marruecos: el mito de Casablanca
Al reservar hoteles baratos en Marruecos podrás conocer la legendaria ciudad donde Ilsa y Rick vivieron una pasión arrasadora.
Puedes visitar el Café de Rick, una recreación del que aparece en la mítica producción de Hollywood y tomarte algún delicioso plato de la cocina marroquí.
La Mezquita de Hassan II es un elegante y airoso monumento blanco y celeste con un minarete bellamente decorado de 210 metros de altura, que lo convierte en el templo más alto del mundo. Es un espectáculo que no olvidarás, especialmente, si lo ves iluminado en la noche.
Si te gustan los mercados, en esta ciudad hay dos: la antigua medina y Quartier Habous o la nueva medina. En ambos puedes perderte en las callejuelas y hacer tus compras, aunque el antiguo es más vital y el bullicio es más intenso.
Al sur de la nueva medina está la Casa de Justicia o Mahakma du Pasha que te dejará boquiabierto con sus decenas de salas de techos esculpidos en madera.
3. Rabat, la bereber
Aunque en la zona existían asentamientos desde el siglo III a. C., el nombre de la ciudad proviene de Ribat al-Fath que quiere decir «Campamento de la Victoria». Es un lugar desde donde partían incursiones bereberes hacia la Península Ibérica.
Uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad es el Mausoleo de Mohamed V, uno de los reyes más recordados y respetados de la historia de Marruecos y héroe de la independencia.
Es una obra de arte diseñada y ejecutada por cientos de artistas en un estilo árabe-andaluz clásico y un lugar venerado por el mundo musulmán. A su impresionante exterior, muy blanco y lleno de detalles arquitectónicos, se une su suntuosa decoración interior.
La Necrópolis de Chellah es otro lugar que no debes perderte y al que puedes llegar con una caminata desde Rabat. Fue un antiguo poblado primero fenicio y luego romano.
Después lo abandonaron hasta que los benimerines instalaron allí su necrópolis en el siglo XIV. Tras una puerta de acceso monumental podrás ver el foro, las salas funerarias y un minarete cubierto de azulejos.
Apunta viajar a Marruecos de primero en tu lista de escapadas de verano para este año.
¡No te arrepentirás!
