Prepárate para disfrutar de un sendero solo apto para los más aventureros. ¿Te atreves a enfrentarte a uno de los lugares más lluviosos del planeta?
Milford Track, al suroeste de la Isla Sur de Nueva Zelanda ha sido bautizado ‘el sendero más bello del planeta’ y, probablemente, de los más duros. Una experiencia única entre atronadoras cascadas, árboles gigantes y glaciares. Tienes que estar en buena forma para recorrer Milford Track, un paraíso verde neozelandés que, a través de sus múltiples rutas, te mostrará tesoros naturales que nunca antes habías imaginado. Al menos no todos en el mismo lugar. Todas las ‘ecorutas’ giran en torno al fiordo Milford Sound dentro del Parque Nacional de Fiordland, Patrimonio de la Humanidad.
Su color verde intenso se debe a que es el lugar más húmedo de Nueva Zelanda y también del planeta, con unos 180 días de precipitaciones al año. Por ello, es conveniente ir bien preparado para que la lluvia y la humedad no estropeen la experiencia. Un buen chubasquero y una mochila impermeabilizada son imprescindibles para hacer frente a las más que probables lluvias que puede que encuentres durante los días que pases en el camino.
Aquí es donde se realiza uno de los mejores ‘trekking’ del mundo. 54 kilómetros de camino que arranca en el Lago Te Anau y que completarás en tres o cuatro jornadas, en excursiones organizadas o por tu cuenta. Podrás dormir en los muchos refugios habilitados y reponer las tan necesarias fuerzas para el día siguiente. Y no sólo es la forma física la que deberás llevar preparada, también tus expectativas. Es posible que veas el paisaje bajo una cortina de agua y una densa neblina que haga que el gris predomine sobre el verde. O bien amanezca despejado y el azul del cielo y del agua combinen a la perfección. Durante tu camino te encontrarás árboles centenarios, cruzarás sobre los ríos por puentes colgantes, cascadas que brotan como si nada de los acantilados, imponentes montañas y glaciares impolutos. Reserva con antelación porque, para proteger el medio ambiente, las plazas diarias son limitadas, así se evitan masificaciones incontroladas.
Si cuando hayas acabado aún te quedan fuerzas y adrenalina, además de haber demostrado que eres un valiente, podrás hacer el regreso en kayak (lo normal es hacerlo en barco, o en avión si el clima es adverso).
Otros trekkings en Nueva Zelanda
Si prefieres un recorrido más corto, en Nueva Zelanda encontrarás otro ‘trekking’ que merece la pena. Dentro del Parque Nacional del Tongariro, The Tongariro Crossing es un trayecto de un día de duración. Este parque nacional está a 20 kilómetros al suroeste del Lago Taupo y contiene el volcán Tongariro, de quien toma el nombre, que está compuesto por doce conos y que cuenta con dos cráteres en su cima principal.
El recorrido ha ido variando a lo largo de los años debido a las más de 70 erupciones que ha sufrido el terreno desde 1898. El paisaje te recordará al planeta marciano por la cantidad de fumarolas y lagos de color esmeralda que irás encontrándote. Unas vistas muy diferentes a las habituales. De hecho, este fue el lugar escogido por Peter Jackson para rodar algunas de las escenas más impresionantes de ‘El Señor de los Anillos’.
Esta ruta de ‘trekking’ es de 18 kilómetros y medio y, aún sin ser especialmente duro, hay que ir preparado para soportar unas condiciones meteorológicas muy cambiantes, ya que en pocos minutos un día despejado puede convertirse en un día de fuertes vientos o densa niebla. De cualquier forma, se puede llegar al parque nacional a través de un tren directo que conecta la capital de Nueva Zelanda, Auckland, con Tongariro.
Y si te has quedado con ganas de más, aún queda mucho por descubrir en Nueva Zelanda. En el año 2011 inauguraron el sendero más largo del mundo. La ruta Te Araroa es un sendero de 3.000 kilómetros que atraviesa el país desde cabo Reinga hasta Bluff (o al contrario). Una ruta famosa por la variedad de sus paisajes, que van cambiando según la zona. En ella podrás disfrutar de la arena de de la costa, de los paisajes volcánicos del norte, de los bosques de las montañas, los terrenos agrícolas o algunos de los hermosos parques nacionales que forman parte de Nueva Zelanda. Un total de casi 4 meses (a un promedio de 25 kilómetros diarios) de recorrido durante los cuáles llegarás a pasar varios días sin ver civilización alguna, en mitad de la naturaleza.
Pero esto no es todo. El país cuenta con nueve rutas oficiales, las más transitadas, sobre todo en verano. Si tienes intención de recorrer alguno de los nueve Great Walks ten en cuenta que deberás comprar un ticket antes de comenzar. Estos tickets cubren el alojamiento en el camino, en diferentes cabañas y en los campings, dado que está prohibido acampar fuera de las zonas habilitadas para ello. Además, cuando compres estos tickets deberás especificar qué días tienes pensados hacer la ruta, dado que los campings y cabañas tienen aforo limitado y funcionan mediante un sistema de reservas.