Este conocido plato tailandés a base de fideos de arroz con huevo y salsa de tamarindo se puede degustar desde puestos callejeros hasta lujosos restaurantes.
Tailandia es un paraíso para los amantes de la buena cocina. Todo el país es un territorio de aromas y sabores que cautivan al más exigente de los gourmet. La riqueza de sus ingredientes, la creatividad gastronómica, la delicadeza en la presentación y la bondad de los aderezos hacen de la cocina tailandesa, una de las más exóticas de todo Oriente.
Ingredientes para 2 personas:
- 125 g. noodles (tallarines) de arroz tamaño mediano
- 4 gambones o langostinos
- 1 huevo
- 75 g. de tofu duro
- 100 g. de brotes de soja
- un poco de cebollino
- 25 g. de cacahuetes (maní) tostados y machacados
- 2 cucharadas de salsa de pescado “Nám-pla” o salsa de soja
- 2 cucharadas de salsa de tamarindo
- 2 cucharadas de azúcar de palma (ó azúcar moreno)
- 2 cucharadas de aceite vegetal (preferiblemente de Soja)
- sal (Opcional)
- media lima
- chili en polvo (al gusto)
Preparación del plato:
1. Lo primero que se debe hacer es poner los noodles en agua del tiempo para que se hidraten y reservar.
2. Picamos el ajo, cortamos el cebollino en trozos de unos 2 cm. de largo, cortamos el tofu en dados y pelamos y limpiamos los gambones.
3. En una sartén, freímos el tofu hasta que se dore, en ese momento se debe añadir el ajo picado.
4. Echamos en la sartén las gambas y las freímos un poco, las sacamos y reservamos para luego.
5. En la sartén añadimos el azúcar, la salsa de pescado y la salsa de tamarindo y freímos bien hasta que quede un poquito caramelizado.
6. A continuación echamos los noodles y salteamos bien para que cojan todo el sabor y color de la salsa, añadimos un poco de agua para que los noodles no se peguen. Seguidamente apartamos los noodles a un lado de la sartén y añadimos el huevo batido, lo freímos rompiéndolo en trocitos.
7. Echamos de nuevo los gambones e incorporamos los brotes de soja y el cebollino y lo freímos todo bien. Una vez en el plato le ponemos los cacahuetes (o maní) picados por encima, brotes de soja frescos y un trocito de lima. También se le puede añadir chili en polvo, azúcar, lima…
El arroz es la base de la dieta y se concibe en innumerables recetas. Su preparación admite diversas formas: hervido, frito o en sopa. Además del arroz blanco corriente, existe una gran variedad de clases. El de más calidad es el llamado arroz con perfume de jazmín, que desprende un dulce y atrayente olor durante su cocción. En la zona del norte el arroz es más gelatinoso y se le conoce como el arroz pegajoso.
Se consume en una mezcla con numerosos alimentos y, al tratarse de su comida básica, los tailandeses son muy exigentes en cuanto a su cocción y temperatura. Los platos de arroz más típicos son aquellos que llevan verduras, gambas o pollo y van acompañados de multitud de salsas. Los tailandeses elaboran con harina de arroz los espaguetis o similares, que allí denominan fideos.
Una enorme variedad de curry está presente en los platos tailandeses y aporta un extraordinario sabor a los ingredientes. En el sur de Tailandia se cocinan los curry más fuertes. Los hay para todos los gustos y paladares. El kaeng tai plaa es muy picante y está hecho con tripa de pescado, judías verdes, brotes escabechados de bambú y patatas. El kaeng leang es más suave y entre sus ingredientes se encuentran la calabaza verde, la piña, las judías y la papaya verde.
Otras variedades que puede probar son el kaeng kari kai, un plato de pollo con curry muy suave al estilo indio, o el kaeng kainaw kai, preparado con bambú.
En los numerosos puestos callejeros podrá degustar el salapau, panecillos de levadura rellenos de carne de cerdo, o los khanon djieb, rellenos de langosta. Estos últimos se mojan en salsa de soja antes de llevarlos a la boca.
En la región del norte, se prepara el larp, un plato característico hecho a base de hígado, cerdo o pato y hortalizas. También son clásicos de esta zona los khao sawy, fideos al huevo en un suave caldo de curry. Los platos de esta zona suelen prepararse de manera más suave y menos elaborada, mientras que la cocina de la región del sur, que tiene su base en los pescados y los mariscos, es más picante.
El nordeste es el lugar ideal para degustar tres platos típicos: kai yaang (pollo a la parrilla y marinado a las hierbas), som tam (ensalada a base de papaya verde) y khao niaw (arroz grumoso).
Y el centro elabora el kaeng phet (curry picante o rojo), el kaeng khiaw waan y el kaeng pha naeng, con un toque de hojas de lima.