La Costa Brava es una de las zonas costeras más bellas que podemos encontrar en nuestro país. Calas y playas de aguas cristalinas, pueblos con mucho encanto y paisajes de ensueño te esperan en este rincón de Cataluña. Un destino ideal para visitar en cualquier época del año y no te defraudará. Así que, ya sabes, reserva en uno de los muchos hoteles baratos en Costa Brava y disfruta de unos días en este pequeño paraíso.
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Te proponemos 20 sitios que no deberías perderte durante tu visita, ¡que los disfrutes!
Imprescindibles Costa Brava
Tossa de Mar
Tossa de Mar está considerado uno de los principales atractivos de la Costa Brava. Su recinto amurallado es uno de sus principales atractivos. Está rodeado de bellas playas y calas que harán las delicias de los amantes de los arenales. Además, es un pueblo cargado de historia y arte y cuenta con una gran oferta de ocio, por lo que lo tiene todo para que disfrutes al máximo durante tu visita.
Cala Pola (Tossa de Mar)
Una de las calas más bellas que podemos encontrar en los alrededores de Tossa de Mar es la Cala Pola. Está situada entre altos acantilados y cuenta con todos los servicios necesarios para disfrutar de un tranquilo día a orillas del Mediterráneo. Es de arena gruesa y las aguas que la bañan tienen un precioso color azul turquesa.
Cadaqués
En pleno Cabo de Creus se sitúa uno de los pueblos más emblemáticos de la Costa Brava, Cadaqués. Además de estar rodeada de un entorno natural único y de contar con un gran número de idílicas calas y playas, Cadaqués posee un casco histórico con una gran vida cultural. Durante décadas fue fuente de inspiración para pintores y artistas. No debes irte de Cadaqués sin visitar la Casa-Museo de Salvador Dalí, una de sus señas de identidad.
Cala Portaló (Cadaqués)
Esta pequeña cala es una de las más bellas que se pueden encontrar en los alrededores de Cadaqués. Su arena fina y sus aguas cristalinas, sumado al impresionante entorno que la rodean, la convierten en un rincón que no debes perderte durante tu visita a la Costa Brava.
Figueres
Dejamos la costa para visitar el municipio de Figueres, lugar de nacimiento de Salvador Dalí y en el que se puede visitar una de sus obras: el Teatro-Museo Dalí. Además, Figueres cuenta con un rico patrimonio entre el que destacan sus viejas murallas medievales y el castillo de Ferran.
Girona
A pocos kilómetros de la costa se encuentra la ciudad de Girona, capital de la provincia en la que se encuentra la Costa Brava. Girona es una ciudad con un rico patrimonio en el que destacan las construcciones medievales. Dentro de su recinto amurallado, la Força Vella, se encuentra uno de sus principales monumentos, la catedral. Una de las estampas más conocidas la encontramos a orillas del río Onyar, donde decenas de coloridas casas se suceden dando la impresión de estar suspendidas sobre el río.
Calella de Palafrugell
Volvemos a la costa para visitar uno de los pueblos más mágicos de la Costa Brava, Calella. Una preciosa villa que conserva intacto su ambiente marinero. Sus calles invitan a pasear disfrutando de esa luz tan especial que el blanco de sus casas nos ofrece.
Lloret de Mar
Es uno de los mayores centros turísticos de la Costa Brava. Cuenta con un gran número de calas y playas de aguas cristalinas en las que disfrutar de un día de sol y playa. Además, cuenta con una gran oferta de ocio y posee un casco histórico de gran belleza y que no deberás perderte.
Palamós
Palamós es otra de las localidades costeras más importantes de la Costa Brava. Una ciudad con todo lo necesario para que el visitante pasé unos fantásticos días rodeado de naturaleza y playas y calas de aguas cristalinas.
Playa el Castell (Palamós)
Una de las playas más destacadas en Palamós es la playa del Castell. Está considerada una de las playas más vírgenes de la Costa Brava. Es una playa ideal para pasar un día en familia, pues es de fácil acceso y cuenta con todos los servicios necesarios (restaurante, baños, alquiler de hamacas y sombrillas…)
Cala Estreta (Palamós)
También en Palamós, se encuentra Cala Estreta. Una pequeña pero encantadora cala. Su acceso no es sencillo, por lo que su afluencia es baja, lo que la convierte en un rincón cargado de paz.
Besalú
Nos alejamos un poco de la costa para visitar uno de los pueblos medievales mejor conservados de España, Besalú. Paseando por sus calles sentirás la sensación de haber regresado al medievo. No debes perderte su puente románico, una de sus señas de identidad y que desde el s.XII permite cruzar el río Fluviá.
Parque Natural de Cap de Creus
Uno de los iconos más importantes de la Costa Brava es, sin ninguna duda, el Parque Natural de Cap de Creus. Un espacio natural privilegiado que, además, es la punta más al este de la Península Ibérica. Está formado por una parte marina y otra terrestre. En la terrestre, existen un gran número de rutas y senderos que harán las delicias de los amantes de la naturaleza.
Roses
Esta bella población se encuentra situada entre el mar y la montaña y rodeada de un gran número de calas y playas que aparecen entre altos acantilados. Es muy recomendable visitar varios monumentos que se encuentran en esta localidad, entre los que destaca el Castillo Trinitat, del siglo XVI.
Platja Nova (Roses)
Entre las playas de Roses, una de las más destacadas es la Platja Nova. Está situada en el núcleo urbano y cuenta con todos los servicios necesarios. Sus aguas son cristalinas y desde ella se puede disfrutar de una maravillosas vistas de toda la bahía en la que se sitúa la ciudad.
Platja d’Aro
Platja d’Aro es otra de las localidades que no puedes perderte en la Costa Brava. Además de los monumentos que encontrarás en su casco histórico, es muy recomendable realizar alguna de las rutas que existen en los montes que la rodean.
Empúries
Situadas en un entorno privilegiado, rodeadas de calas y playas y con unas espectaculares vistas del mar Mediterráneo, se encuentran las ruinas griegas de Empúries. Más de 2.500 años de antigüedad lo convierten en uno de los lugares de parada obligada cuando se visita la Costa Brava.
Pals
A pocos kilómetros del mar Mediterráneo y sobre una colina, se encuentra Pals, un precioso pueblo que conserva intacta su esencia medieval. Es más que recomendable acercarse hasta él y descubrirlo paseando por sus empedradas calles.
Begur
Muy próximo a la costa y rodeado de bosques de pinos, aparece un pueblo con mucho encanto, Begur. En sus alrededores, se situán varias playas de gran belleza, entre las que destacan la cala Illa Roja y Aiguablava, dos rincones ideales para disfrutar a orillas del Mediterráneo.
Además de estos 20 rincones, la Costa Brava ofrece una gastronomía exquisita, lo que hará que tu visita a esta maravillosa zona sea aún más inolvidable. ¿Aún te quedan dudas? No lo pienses más y anímate a visitar este destino en el que disfrutarás de rincones idílicos rodeados de naturaleza y a orillas del Mediterráneo. ¡No te arrepentirás!
